domingo, 22 de abril de 2012

Se cumplen 10 de la Plataforma de Solidaridad con Palestina de Sevilla


"Hasta que el pueblo palestino no sea libre, no habrá justicia"
Antonia Ceballos. http://www.laredinformacion.es

2002 fue un año especialmente difícil para las esperanzas de paz en el conflicto árabe-israelí. Uno más. Aquel año se comenzó la construcción del muro de la vergüenza; un muro que complicaba aún más las posibilidades de reconciliación de dos pueblos enzarzados en una disputa desigual saldada con tres guerras y dos intifadas, además de miles de desplazados. No obstante, lo peor aún estaba por llegar: la victoria de Hamas (considerado como un grupo terrorista por un número importante de países) en las elecciones democráticas palestinas provocó las iras de Occidente e Israel y condenó a los palestinos a un bloqueo insostenible bajo el que cualquier otro pueblo hace tiempo que hubiera claudicado.
Sin embargo, también en 2002 se escribió una pequeña parte de la historia de Palestina mucho más positiva. Fue aquí, a muchos kilómetros de la tierra prometida, en Sevilla, donde vio la luz la Plataforma de Solidaridad con Palestina. Bajo el amparo de la Asociación Pro-Derechos Humanos de Andalucía y con el impulso de la activista Alejandra García, nacía este grupo que poco a poco se ha ido haciendo un hueco en la sociedad sevillana.
La Plataforma de Solidaridad con Palestina de Sevilla no desarrolla proyectos de cooperación, por lo que no recibe subvenciones y realiza su labor sin ningún tipo de atadura política. Así nos lo hacía saber María Manrique, miembro de la plataforma, este fin de semana durante la celebración del décimo aniversario de la Plataforma.
Sus actividades son, sin embargo, de lo más diversas. Por apuntar sólo algunos ejemplos: en estos diez años sus miembros han hecho desde un ayuno de 24 horas para llamar la atención sobre los presos políticos hasta un concierto de rock que agrupó a Celtas Cortos, SKA-P o Porretas; pasando por un flotilla simbólica por el Guadalquivir, encierros, manifestaciones o presentaciones de libros.
Campaña a favor de los presos
La israelí Zohan Chamberlain sosteniendo una pancarta en favor de los presos políticos palestinosCuando le preguntamos a María Manrique en qué proyecto se encuentran trabajando en estos momentos, esto es lo que nos contesta: “Hay muchas actividades que surgen según los acontecimientos, según lo que vaya pasando. La campaña de presos la tenemos planteada, pero los acontecimientos van marcando un poco. Tenemos contactos abiertos este último año con asociaciones de defensa y apoyo de los presos palestinos, allí en Palestina, y estamos en contacto también con las familias. Tenemos una campaña abierta por la libertad de los presos y estamos pidiendo colaboración a la gente y a las asociaciones”.
El 17 de abril se ha celebrado el Día de los Presos Palestinos. En el comunicado de la Plataforma con motivo de este día podemos leer: “En la Palestina ocupada, las detenciones y la cárcel son tan comunes como la salida y la puesta del sol. Cada familia palestina, en algún momento, ha tenido encarcelado a un miembro u otro de su familia. La cuestión de los presos es algo que afecta directa y ampliamente a toda la sociedad palestina”.
Y es que en Israel hay unas 360 personas en detención administrativa; entre ellas mujeres, niños y parlamentarios palestinos. Pero, ¿qué es la detención administrativa? María nos lo explica: “la vida de los palestinos se rige por órdenes militares en todos los aspectos de la vida, social, laboral, económico y lo que más afecta es a los presos. En una detención administrativa no se presentan cargos y por tanto no pueden plantear una defensa. Es una cuestión ilegal absoluta y muy cruel porque puedes tener detenida a una persona por tiempo indefinido sin saber por qué y sin que la familia lo sepa”.
Una israelí pro-Palestina
En el cumpleaños de la Plataforma nos encontramos con Zohar Chamberlain, israelí afincada en Alájar, en la provincia de Huelva. Zohar asegura que podría vivir en Israel, pero que no lo hace porque elige “no vivir allí para no participar, para no dar mi apoyo con mi presencia, con mis impuestos al gobierno israelí y a la mayoría que todavía no se dan cuenta de las barbaridades que se hacen”.
El padre de Zohar era soldado y participó en la guerra de los seis días de 1967: “Él se percata de la situación alrededor del 67. Es un soldado, participa en la guerra; pero después se da cuenta de que estos territorios recién ocupados van a presentar un problema a largo plazo. No se puede decir que sea activo políticamente, no está en ningún partido, pero empieza a hablar. Yo nazco en el año 70, entonces yo desde el primer paso estoy concienciada de la dificultad de esta situación".
Zohar participa en la coalición internacional que intenta romper el bloqueo al que está sometido el pueblo palestino. El año pasado se embarcó junto con Diego Cañamero, del Sindicato Andaluz de Trabajadores, en el barco que intentaba romper el bloqueo desde España y que se quedó atrapado por el gobierno griego. Pese a que no consiguieron su objetivo, Zohar saca algo en positivo: “Yo creo que ha habido fallos de organización a nivel de la coalición internacional y a nivel del Rumbo a Gaza, específicamente. Sin embargo, ha cosechado algunos éxitos importantes, como la presencia en los medios de comunicación, el hacer saltar el tema de Gaza y del bloqueo en la prensa. Digamos que conseguimos poner en una situación bastante incómoda al gobierno de Israel que ha tenido que hacer esfuerzos enormes y barbaridades como el sabotaje de barcos o el chantaje a los gobiernos. En este sentido, fue un éxito".
Un palestino exiliado
También nos encontramos con el Doctor de Falla, un palestino que nació fuera de su tierra y que lleva 40 años en España. “Mi madre salió con 16 años y mi padre con 20. Tuvieron que emigrar a Damasco y vivir allí en malas condiciones. Luego se casaron y nací yo”, nos cuenta. Este médico palestino llegó a España de casualidad:“Realmente yo iba a ir a Estados Unidos, pero mis padres se informaron de que en España son nuestros hermanos. Miraron el mapa de la tierra y dijeron: “aquí te vas a ir, a Madrid”. Y aparecí a los 7 días en Madrid y luego el mismo día vine a Sevilla".
El Doctor de Falla tiene el corazón dividido, la mitad es palestino y la mitad es español. Sin embargo, no puede viajar a la tierra de sus antepasados. “No, no podemos viajar a Palestina. Acabo de hablar con uno que dice que cada vez que viaja lo humillan, lo meten en una habitación cerrada y lo tratan mal porque no quieren que ningún palestino vuelva a visitar su tierra.” Y para los que están dentro es aún peor: “Los que están dentro de la tierra están colonizados, aplastados y viven sin ser respetados”. Pese a todo, prefiere mirar al futuro con optimismo:“Yo digo que los ríos siempre vuelven a su cauce. Más tarde o más temprano se tiene que solucionar. Después de la tormenta siempre tiene que venir algo que lo arregle”.
Sólo cuando llegue ese momento, los movimientos sociales como la Plataforma de Solidaridad con Palestina dejarán de ser necesarios. Y es que como nos decía María Manrique: “Hasta que el pueblo palestino no sea libre, no habrá justicia".

No hay comentarios:

Publicar un comentario